Yakarta, 21 de febrero de 2013
Puede ser que las cosas a veces parezcan tan opuestas, sin embargo al reflexionar se ve que están muy estrechamente relacionadas. Personalmente siento este contraste entre la Misa a la que vamos temprano en la mañana y mi participación en una reunión del personal de la ONG en Yakarta, FAKTA (Foro para los residentes de Yakarta). La misa es una experiencia de gran reverencia y solemnidad. La gente expresa su devoción a través de sus cantos. Al momento de la elevación de la hostia suena un gong profundo y resonante, y contengo mi respiración. Algo del misterio de este momento reverbera por la congregación.
Más tarde en la mañana, recibo una bienvenida calurosa y ruidosa a FAKTA en una reunión de personal de trabajadores energéticos (voluntarios, educadores, organizadores de la comunidad, abogados, etc.) quienes abogan a favor de los pobres de Yakarta. Los 'pobres' de Yakarta significa un 65 por ciento de la población donde el desempleo, la vivienda, la salud y el transporte todos presentan graves problemas. El ambiente de la reunión es vibrante y lleno de diversión. También son evidentes la pasión y el pragmatismo. FAKTA se compromete a capacitar a las comunidades locales a través de campañas, talleres de análisis social y de desarrollo de liderazgo de base. La gran mayoría de la gente de la comunidad es musulmana. Entre los ocho grandes grupos de barrio que FAKTA apoya hay una comunidad de desplazados que ha construido su vida en un cementerio vecino en desuso. En la reunión de personal se han puesto en marcha estrategias para una campaña antitabaco. Cuando me entero de que la Sociedad del Sagrado Corazón apoya el trabajo de FAKTA a través de nuestro Fondo de Solidaridad me siento muy orgullosa. Mi comprensión y oración por esta organización llegarán más allá de Indonesia.
Y ¿cuál es la conexión de esta ONG ocupada en atender a los problemas de su comunidad en su mayoría musulmana y la reverencia sosegada de la misa? Me recuerda la reflexión de Teilhard de Chardin sobre la Eucaristía en "La Misa sobre el mundo". Es algo sobre la presencia de Dios impregnando no sólo nuestro vasto universo, sino también nuestro mundo complejo.
Anne Corry, rscj
Provincia de Australia-Nueva Zelanda
